lunes, 14 de octubre de 2013

LA BASÍLICA PALEOCRISTIANA DE GERENA (SEVILLA). PROPUESTA DE RECONSTRUCCIÓN.


       SITUACIÓN

La basílica de la cual trataremos se encuentra en Gerena, localidad de la provincia de Sevilla, en el cuadrante Noroccidental, confluyendo con tres comarcas naturales: La Sierra Norte, La Vega y El Aljarafe. Limita al norte con los términos municipales del Castillo de las Guardas y El Garrobo, al este con el de Guillena, al sur con Salteras y Olivares y al oeste con una estrecha franja de Sanlúcar la Mayor. Dista de Sevilla unos 23 km.
La basílica y la necrópolis que nos ocupa se encuentra dentro del casco urbano de la ciudad, a las afueras, a la entrada cuando se viene desde Sevilla.
Situación de la basílica en el casco urbano de Gerena.


LA BASÍLICA

Esta basílica debemos integrarla en el grupo peninsular considerado por Palol típico de la costa mediterránea, incluida Baleares, que es en Siria muy frecuente, y que se difunde también por el norte de África.
En todo el conjunto, podríamos distinguir tres fases de construcción. Una primera en la que se construye la basílica, una segunda en la que se le añade el baptisterio, con una pila en planta con forma de cruz griega, y una tercera fase, en la que lo que cambie es la pila bautismal, que pasa a ser circular en la que los brazos de una cruz apenas están indicados por lóbulos, y está elevada del suelo.
Se desarrolla a partir del siglo IV, aunque su mayor esplendor será en el siglo V, momento en el que se podría fechar con seguridad, posteriormente se le agrega el baptisterio, y en el siglo VI, se modifica la pila bautismal. Su uso se extiende por todo el siglo VII y principios del VIII, hasta la llegada de los árabes, y la consecuente pérdida de fuerza de la religión cristiana en las zonas ocupadas. A partir de este momento, podría haber perdurado quizás un poco más su uso, conviviendo con ellos, pero de esto no existe ninguna constancia arqueológica.
Presente una tipología uniforme: Basílica y cabecera tripartita cerrada al exterior por un único muro recto. Las naves se separan por columnas. El altar, delante del ábside, rodeado por cancelas y en éste el banco presbiterial.
Muy parecida a esta planta es la basílica V de Thelepte, en el norte de África. También se asimila a las de Henchir el Abiod y Henchir Guesses. Aunque aquel que guarda más parecido con esta es la basílica de Bobalá, en la provincia de Lérida, o la basílica de Son Peretó, en Mallorca. Otras basílicas que pueden asociarse a la de Gerena son la de Sou Bou, también en Mallorca y las de Es Fornás de Torrelló e Illeta del Rey en Menorca.
La basílica de Gerena también se uso como necrópolis, encontrándose la mayor parte de las tumbas en la nave mayor.

ESTADO ACTUAL

La estructura que se encuentra en las excavaciones es una planta rectangular, orientada de forma E-O, con tres naves y cabecera tripartita plana. Posee un ábside central y dos laterales. El baptisterio se sitúa a los pies de la iglesia, con la piscina bautismal en el centro.
El conjunto posee unas dimensiones de 24,30 metros (baptisterio incluido) por 9,30 metros de anchura, siendo la longitud de la basílica sin el baptisterio de 18,40 metros.
De la iglesia sólo se conservan los cimientos, perfectamente trabados entre sí y que se levantan sobre una base de roca calcárea que es nivelada debido al declive del terreno en el sentido N-S.
Los cimientos son de dos tipos: Los exteriores, realizados con ladrillos fragmentados, trozos de tégulas y alguna piedra. Los interiores, en los que predomina la mampostería, con escasas inclusiones de ladrillos y tégulas, unidas con mortero como el de los muros exteriores. Y se levantan sobre una base de roca calcárea que es nivelada debido al declive del terreno en el sentido N-S.
La anchura de estos son muy regulares, la medida es de 0,76 a 0,80 metros, excepto para la cabecera, que oscila entre 0,9 y 1 metro de grosor.
El edificio se compone con un trazado muy regular, compuesto simétricamente según un eje longitudinal. El ábside mide 2,50 metros de longitud por 3,40 metros de largo y las pastoforias 1,50 metros de ancho interior por 2,70 metros de largo. La nave central está cortada al O. Por un muro transversal que crea un pequeño espacio rectangular a sus pies, con unas medidas de 3,30 metros por 1,54 metros.
En los cimientos que separan la nave norte de la central, aparece una pequeña oquedad circular que podría corresponder al asiento de una columna, con un diámetro de unos 0,60 metros y separado 2,20 m. Del muro transversal de la cabecera.
Las naves laterales tienen un ancho de 1,50 metros y una longitud total de 16,70 m. A los pies de la nave norte, ha aparecido una losa de granito paralepipédica, de 0,70 metros de lado y 0,23 metros del alto, que se asocia a una posible puerta, hipótesis corroborada por el desgaste que presenta, que debió ser por el pisar continuo, además de presentar una pequeña oquedad (posiblemente para un gozne) y otra rectangular (para encajar el marco).
Del pavimento apenas quedan restos, solo una pequeña superficie de “opus signinum”.
El baptisterio, a los pies, posee las dimensiones de 5,90x9,30 metros, que debió estar adosado a la iglesia debido a que no presenta una unión con la cimentación de la misma, y cuyos cimientos presentan una anchura que oscila entre 0,80 y 0,90 metros. En el lado meridional apareció una basa, en el mismo eje que el del muro de la basílica. También es este caso el poco pavimento aparecido es en “opus signinum”.
En el eje de la basílica aparece la piscina bautismal. El lado oriental del recinto se separa de la basílica por un sillar de piedra caliza con restos de argamasa. En el pavimento, también se observa una interrupción, paralela al muro de la basílica, que podría indicar la existencia de otro muro o construcción más elevado, dejando entra basílica y baptisterio un estrecho pasillo para permitir, quizás, el acceso por este lado sin pasar por la sala bautismal.

                    Planta de la Basílica

           Vista general de la Basílica (imagen de )

ESTADO RECONSTRUIDO

En base a los restos de la basílica encontrados, que se limitan al nivel de cimentación, y a una basa de una columna encontrada en el baptisterio y una oquedad en uno de los muros de cimentación, que hace pensar que correspondería con el lugar donde se encontraría una columna, podemos establecer una hipótesis de cómo sería la estructura de este edificio y establecer sus secciones y alzados aproximados.
Por la situación de los cimientos, podemos decir con certeza que la iglesia estuvo compuesta por tres naves, una central más amplia y dos laterales más pequeñas. El ábside, plano, se situaba en su centro, con otras dos salas de la misma longitud que este pero más estrechas (en correspondencia con el ancho de las naves laterales).
La separación de la nave central de las laterales, se realiza a través de columnas, hecho constatado por la aparición de la oquedad, que correspondería con la base de una primera columna, que por la separación que existe entre el eje de esta y el baptisterio, podemos establecer la separación en unos 2,2 m. Y estaría compuesto por cinco columnas a cada lado. Cada uno de estos soportes estarían conectados por arcos de medio punto, con un total de seis arcos a cada lado.
En el baptisterio, nos encontramos con la misma situación, la sala bautismal debió estar unida a otras salas o ámbitos, que estaría unidas a esta pero de forma independiente. Teniendo en cuenta la aparición de una basa de una columna, en el mismo eje que el de la cimentación de las naves de la iglesia, donde iría el columnado, estos espacios deberían ir separados también en consecuencia por columnas, y dejar el espacio dividido en tres zonas.
Con respecto a la puerta de entrada al recinto, comparando con la mayoría de las basílicas símiles a la de Gerena, sobre todo la de Bobalá, que es la que guarda mayor similitud, poseían dos puertas de entradas laterales, una al norte y otra al sur y la comunicación entre la cámara bautismal y el templo se hacía por puertas colocadas a los pies de las naves laterales. En el caso de la que nos ocupa, podría tener una sola puerta, que se encontraría sobre el muro sur aproximadamente a mitad de la basílica, suposición realizada en base a la posición de las tumbas que se encuentran fuera de la basílica, que se agrupan como en dos grandes grupos, y dejan libre un espacio que parece ser un camino, que debería terminar en una puerta. Aquí, además, debe ser por fuerza lateral debido a la posición del baptisterio, que le impide tener un acceso desde la calle a la basílica a los pies.
El único registro que queda sobre la posición de una puerta es el que ya comentábamos antes, por lo que esta pudo servir, una vez ampliada la iglesia, para que los nuevos cristianos entraran en ella una vez bautizados.
En un principio, probablemente la puerta principal estaría en el centro, a los pies de la nave central, pero con la ampliación quedaría cegada y sería cuando sería abierta la lateral que ya apuntábamos.
Se descarta la posibilidad de que hubieran dos ábsides contrapuestos, como ocurre en otras basílicas de planta rectangular y muros rectos, por que esta tipología con origen africano es mucho más tardía que la basílica de Gerena.
Al final de la nave central, aparece un muro trasversal, que podría interpretarse ese espacio que cierra como un coro elevado o como un atrio, y por tanto, que en la primera fase de la basílica existiera una puerta a los pies de la nave central, que desapareció con las construcción del baptisterio.
Por los restos que han quedado de la iglesia, se puede pensar que estuvo toda ella al mismo nivel. Por este mismo motivo, no podemos saber la posición exacta del altar, ya que no queda ninguna huella, aunque por la posición de las tumbas, que deja libre la cabecera de la nave central, se podría decir que podía ser esa su posición.
Las cubiertas del edificio sería de teja cerámica, con estructura de vigas de madera, con una inclinación del 40 % aproximadamente, inclinación que sería la misma tanto para las naves laterales, a un solo agua, como para la cubrición de la nave central, en este caso a dos aguas con cumbrera central.
En cuanto a la altura de la iglesia, teniendo los cimientos, y el diámetro de la columna, podríamos establecer un predimensionado como el siguiente:


Como vemos del cuadro, calculando la altura del fuste según los esfuerzos a comprensión, que sería cómo se produciría la rotura, obtenemos una altura de casi 100 metros de altura, algo impensable en un edificio de esta época y de estas características, por lo que se confirma la sospecha de que estas columnas serían de material de expolio, por lo que para establecer la altura de la basílica recurriremos a relaciones geométricas, teniendo en cuenta sobre todo las dimensiones en planta del edificio, y estableciendo una relación según estas con su altura para evitar que se cree un “efecto tubo” en la nave central sobre todo, ya que si establecemos una altura muy grande, teniendo en cuenta la poca luz de la nave, la sensación de estrechez y de claustrofobia aumentaría.
Para establecer una altura aproximada del edificio, inscribimos este en un cuadrado de lado la anchura total de la iglesia, en este caso 9,30 metros, y establecemos que la altura total será 5/6 de la base del cuadrado, por lo que tenemos para la basílica una altura total de 7x,75 metros.
Como tenemos la luz de cada una de las naves, y la inclinación aproximada de las cubiertas, podemos establecer la altura de este cuerpo y así en proporción la altura del triforio y de las columnas, incluidos basa y capitel, y la altura total de los muros de cerramiento del conjunto. Para el triforio, establecemos como altura 1/3 de la altura total del edificio, que sería por tanto 2,60 metros de altura para este cuerpo. Si sumamos la altura de la inclinación del 40% del cuerpo de cubierta, tenemos una altura de 1 metro aproximadamente.
Respecto a los arcos de medio punto, tenemos la dimensión de su radio establecida por la separación de los soportes (2,20 m.) por lo que nos queda un radio de 0,80 metros para el arco romano.
Si realizamos la suma de todas estas altura de cada una de las partes que compondrían la separación de la nave central de las laterales, nos queda una altura total para los soportes de 3,20 metros.
En relación a la altura del baptisterio, y a razón de la basa encontrada, al ser esta de un diámetro menor que el hueco encontrado en las naves, posiblemente la altura de este espacio sería menor que la de la iglesia, teniendo la cubierta una continuidad y la misma altura que la de las naves laterales.
Con relación al ábside y las naves laterales a este, posiblemente  el primero tendría una altura similar a la de la nave central, variando el tipo de cubrición, que pasaría de ser de dos aguas a tres aguas, de forma que fuera identificado desde el exterior, siendo en este caso también las dos estancias laterales de una altura menor que la de las naves laterales, haciendo que este resalte mucho más desde el exterior.
Para la iluminación de los espacios, se dispondrían huecos a los largo del muro de la nave central, en altura, que dieran luz a este espacio interior y aligerara así también las cargas que debía soportar el columnado. Para las naves laterales, a una altura lo bastante alta pero sin llegar a ser mayor que la altura mayor del arco, se disponen en la misma situación huecos más estrechos que iluminen los espacios laterales. En el baptisterio, el ábside y las estancias laterales se dispondrán huecos de las mismas dimensiones que las naves laterales.


                  Planta de la Basílica
                                 Planta de Cubierta


                 Alzado longitudinal

Alzado desde el baptisterio

             Alzado trasero

            Sección A-A'


             Sección B-B'


             Sección C-C'


           Esbozo a mano alzada del interior


BIBLIOGRAFÍA


BENEVOLO, L. (1992): Introducción a la arquitectura. Madrid. 
CHEVARRÍA ARNAU, A. (2009): Archeologia delle chiese. Dalle origine all’anno mille. Roma. 
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KRAUTHEIMER, R. (1965): Arquitectura paleocristiana y bizantina. Madrid. 



















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